miércoles, 17 de diciembre de 2008

Encerrada.


Había una vez una mujer que se que quedo sin familia, así que se volvió loca.
Un día oscuro y triste, como en ninguno de aquellos siglos, la mujer se fue a vivir al cielo con ayuda de las estrellas. Esta mujer era una inventora muy famosa y creó una casa que podía flotar en el cielo. Una noche sin saber qué comer decidió bajar a la Tierra para buscar víveres para su mascota, que era la Luna. Al no poder bajar porque había gastado toda su magia, por ser un espíritu, decidió crear una chimenea estelar por la que pudieran bajar las estrellas y con ellas hacer papilla. La espíritu le pidió al Sol si con su calor podía atraer los hierros con los que hacer la chimenea. Él lo intentó y lo consiguió. La espíritu construyó la chimenea estelar pero no funcionaba porque le faltaba una manivela con la que poder deshacer las estrellas. Ella soltó a la Luna para que robara de la ferretería del pueblo una manivela, pero no le salió muy bien, las cámaras lo habían grabado todo y la llevaron a la perrera. El Sol ayudó a la espíritu a bajar a la Tierra para coger a la Luna con celda incluida. Compró la manivela y volvió al cielo. Cuando llegó la noche la espíritu terminó la chimenea estelar y le dio de cenar a la Luna.

Escrito por:

Paola, Marcos, Erin y Javier.

1 comentario:

Pip dijo...

Muy original y diferente! me ha encantado!